Durante el 7 de mayo de 2024, se presentaron en menos de tres horas en forma operativa, y que no se espera que suceda al mismo tiempo, y fueron.
Aumento de la demanda debido a una mayor sensación térmica por parte de las personas, lo que originó una mayor demanda del uso de algunos equipos para acondicionar el lugar donde las personas estaban haciendo sus actividades.
La pérdida de algunas plantas de generación de electricidad, y la disminución en la producción de las de tipo renovable.
La falta de una hora de luz solar por el cambio actual en el horario. La demanda aumentó, al encender al mismo tiempo alumbrado público, personas llegando a su hogar, comercios, industrial, hoteles, entre otros.
Los tres puntos anteriores son consecuencia de la demanda del mercado y las decisiones adoptadas por las políticas públicas. La realidad que se presentará a corto plazo será la falta de infraestructura en la distribución, debido a que en algunos lugares las líneas no han sido reforzadas, o algunos transformadores no tienen la capacidad necesaria ante el aumento de la demanda de lugares que hay más usuarios de los esperados.
Sin una buena red de distribución, no hay manera de tener la confianza necesaria de establecer una industria, comercio, oficinas o sitios que generen o sean parte del producto interno bruto.
¿Sería necesario invertir en la creación de su propia planta por un usuario final? Los parques industriales que pretenden albergar a empresas para el Nearshoring tendrán la certeza de no aumentar costos, si en algunas horas pueden cesar la producción.
En los últimos días, han comentado el poder ejecutivo, requiere a empresas privadas para poder hacer frente a las crisis que vendrán en los próximos años, ante el incremento de la demanda esperada de crecimiento entre el 4 a un 6 % en la próxima década. ¿Por qué ahora surge este enfoque? La realidad es que, ante una alta tasa de interés para financiar un proyecto propio o ser parte de un servicio a la empresa del estado, las empresas privadas están evaluando la forma en que pueden recuperar el financiamiento, ante un costo del dinero que no disminuye. A esto se añade que, en los últimos cinco años, la industria eléctrica ha estado en litigios en el poder judicial, lo que ha generado incertidumbre que afecta las decisiones de invertir por privados. Una de sus cuestiones al comienzo de cada proyecto es si cambiaran las leyes, normas o expropiaran lo realizado, ante los antecedentes actuales que han tenido lugar en México.
En la actualidad, la Comisión Federal de Electricidad ejerce el control del 75 % del total de la electricidad producida. Además, tiene la potestad del control, operación, y mantenimiento de las líneas de transmisión y distribución.
Hoy, en México, existe la inquietud por los apagones, y la falta de confiabilidad en la red. Sin embargo, cuando se dispone de electricidad y a temperaturas que oscilan entre 2 y 3 grados por arriba de lo observado por CONAGUA en 2024, en comparación con el año 2023, las personas deben experimentar una sensación de confort durante sus actividades, incrementando el tiempo de uso de los sistemas de enfriamiento. Esto ocasionará un elevado costo en los recibos de la electricidad, lo que ocasionará un desequilibrio en las finanzas familiares.
En la actualidad, el servicio doméstico se encuentra limitado a la facultad de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para brindar este. El cual actualmente cuenta con siete tarifas. Las cuales se basan en la temperatura observada, donde se encuentra el consumidor, y en cada una de ellas se establecen rangos en función del consumo. A medida que la temperatura sea más elevada, el costo del recibo es menor, dado que existe un mayor rango antes de pasar a un costo más elevado por cada kW consumido (3.70 pesos por kW).
Las tarifas que ostentan temperaturas superiores a los 31oC (1D,1E y 1F), pueden costar entre 2.5 y tres veces menos en comparación con aquellos usuarios que su temperatura se encuentra por debajo de este valor (1A,1B y 1C).
En 2024, se ha registrado un aumento de la temperatura en 2oC en comparación con el año anterior, lo que indica que los usuarios con menor rango pagarán más por el recibo de la luz, debido al aumento del uso de los sistemas de enfriamiento.
La CFE estima que, por cada grado menos de temperatura regulada en un espacio a través de sistemas de enfriamiento, el consumo aumenta entre un 4 y 6 %. En otras palabras, en el caso de que la temperatura sea de 33oC en el exterior y se regule la habitación a 25oC, se puede incrementar entre 25 y un 40 % el consumo, lo que puede generar un costo mayor.
Propuesta:
Se requiere eliminar las tarifas 1, y 1A. Las tarifas de 1B, 1C, y 1D deben cambiar el rango a donde inicia el costo más alto de electricidad, cuando menos en un 75 % por encima del actual, y la tarifa 1E un 50 %. Esto incrementaría la demanda debido a la capacidad de utilizar una mayor cantidad de electricidad, lo cual otorgaría una mayor asistencia gubernamental para compensar los gastos del usuario. Sin embargo, esto puede desaparecer, siempre y cuando haya inversión pública con privada para reforzar o incrementar las líneas de transmisión y distribución, debido a que de cada peso que pagas entre el 40 y un 60 %, corresponde transportar la electricidad. Al haber mayor demanda, deberá haber más plantas de generación con mayor eficiencia.
La CFE, al forzarla a alcanzar un rendimiento óptimo, podría reducir su subsidio otorgado por el gobierno, dado que en la actualidad se adiciona como ingreso a la empresa, para compensar las pérdidas derivadas de la actividad de generación.
Además, llevar a cabo inversiones públicas y privadas en la transmisión-distribución con el propósito de mejorar la calidad de las carreteras eléctricas del país.
Los apagones son un problema que tiene una solución con la inversión a esta, pero el incremento de la demanda, el dolor de cabeza del usuario final, al tener que pagar más por lo consumido.
Desde el anuncio oficial de la llegada de Tesla y otras importantes inversiones en el norte de México, la discusión sobre la falta de infraestructura energética y la poca confianza en el actual suministro se han vuelto una de las exigencias centrales del sector a fin de establecer la seguridad necesaria a los inversionistas extranjeros por refrendar su decisión de cambiar sus inversiones a nuestro país y región. Sin embargo, otras de las necesidades que también debe atenderse son las políticas a nivel nacional en materia energética, así como la falta de recursos naturales, como el agua.
Dentro del contexto del cambio político que tendrá lugar en México en julio de este año, la política energética del nuevo gobierno deberá integrar una correcta planeación del sistema eléctrico y generación térmica, así como exploración y extracción para elementos del gas natural, que esté en línea con los compromisos climáticos e internacionales del país, y que esté integrada con una política industrial que tenga a consideración las empresas privadas y no sólo el suministro que se da desde la Comisión Federal de Electricidad.
Lo anterior entra en línea con los esfuerzos realizados desde Nuevo León, la planeación del sistema eléctrico ha sido una de las variables que más atención se le ha prestado desde la Agencia de Energía Estatal, con el fin de atender la presente y futura demanda de electricidad tanto para consumo industrial como para consumo doméstico, con la mano también del sector privado.
Por otro lado, la escasez del agua es un tema de especial interés en el que tanto sociedad civil, como gobierno e iniciativa privada debemos prestar atención. Basta con recordar la terrible sequía que azotó nuestro estado el año pasado, y las condiciones que de esto derivó, reflejando que más allá de los requisitos inmediatos para consolidar a Nuevo León como vanguardista en el ámbito de nearshoring, hace falta una transformación integral de muchas variables para asegurar la estadía de nuevos inversionistas y el bienestar de las familias en Nuevo León.
Desde Enicon, consideramos elemental trabajar en todos los aspectos relevantes para mantener a Nuevo León como referente nacional e internacional de atracción de inversiones, tanto en el mejoramiento de infraestructura para el sector energético, así como las políticas nacionales que beneficien a este sector, así como el trabajo con la sociedad civil y gobierno para cuidar a toda costa nuestro medio ambiente.
Andrés Lankenau, CEO de Enicon Energy&Infraestructure Co.
PEMEX, una organización con una carga financiera, operativa, recaudadora, proveedora, ambientalista, transitoria, y además fuente de empleo. En consecuencia, no se dispone de un objetivo concreto de largo plazo, ya que la dependencia enfermiza de tener el control de esta por parte de la parte política entre el poder ejecutivo y el legislador, no la dejan ser una empresa mundial.
Al inicio de la creación de PEMEX en 1938, el propósito primordial consistió en el control y la gestión de los hidrocarburos para su explotación. Tuvieron que transcurrir más de cuatro décadas, para que pudiera ser considerado como parte de la estructura geopolítica de países productores de petróleo. Una vez reconocido como parte del ámbito petrolero, durante un período de tres décadas y media, ejercía una hegemonía en el negocio, vinculado a la exportación de petróleo crudo y la existencia de una cantidad suficiente de combustibles para impulsar la economía en el país. En aquel entonces, la empresa tenía la obligación de poder realizar pagos, derechos, y la recaudación de impuestos para la nación. Siendo estos altos, y que la empresa debía de cumplir con ellos, fuera como fuera. La empresa fue sucumbiendo ante esta situación para poder cerrar el déficit entre los ingresos, y los costos financieros, y pagos a la nación. La empresa tuvo que solicitar deuda para poder satisfacer esto, y lo cual no formaba parte del dinero necesario para invertir en mantener la producción, o continuar con el mantenimiento de refinerías para poder cubrir la mayoría de la demanda interna del país. Se trataba de una deuda impositiva de inquisición, con el fin de que la nación pudiera satisfacer el déficit presupuestal.
La reducción del presupuesto en 2015 y la imposición de endeudar a la empresa con el objetivo de cumplir con el ingreso requerido por la nación hasta 2018, provocó una disminución en la producción de petróleo de 2.5 millones de barriles diarios a 1.8 millones. Esto generó como consecuencia: El dejar de refinar y mantener la plataforma de exportación de petróleo crudo por encima de un millón de barriles diarios, y dejar entre 600 y 800 mil barriles para refinar. Durante este período del tiempo, el negocio estaba destinado a mantener divisas para el país, y no ingresos necesarios para mantener a la empresa operando de manera adecuada, y cómo debe ser una empresa de esta industria. No olvidemos que los préstamos de PEMEX, realizados, forman parte del total de la deuda pública de México.
En 2015, la empresa tuvo un primer indicio de poder ser autónoma al establecer una reducción programada en cierto tiempo para reducir el derecho de utilidad compartida, y la cual partió de un 70 % para reducir en un 65 % en 2019, y de estos años en adelante mantendría constante, es decir cautiva dentro de la ley de ingresos.
A partir de 2018, ante las cuestiones geopolíticas y la nueva política de poder controlar al mercado a través de la empresa del estado, y ante la apertura que indicaba que cualquier empresa privada podría hacer la competencia a esta. En 2019, se llevaron a cabo diferentes acciones y cambios en las políticas, normativas y regulaciones para que la empresa del estado tuviera el control de las inversiones en el sector de hidrocarburos, y que, hasta la fecha, representa un 90 % del total de inversiones. Dependemos de la inversión gubernamental.
Desde hace más de ocho décadas, PEMEX no ha podido pasar de la adolescencia financiera a una adultez como empresa mundial. Dado que está sujeto a las políticas públicas y las decisiones que se toman por parte del administrador en turno y del consejo de Pemex, en el que se encuentran involucrados la secretaria de energía y hacienda. Además de depender de las subvenciones que el Congreso otorgue en cada presupuesto, así como de las directrices que cada director ha sido instruido, reduciendo al estilo de gestión que puede tener en la empresa.
Hoy en día, la empresa del estado, el modelo de negocio, cambio la manera de obtener una mayor cantidad de ingresos. A causa de la comprensión de que el negocio real de los hidrocarburos no se encuentra limitado a la comercialización del petróleo o gas extraído, en caso de no contar con las condiciones financieras e infraestructura necesarias para llevarlo a cabo, tal como se encuentra en la actualidad.
El 80 % de la producción se encuentra en aguas someras, lo cual genera un mayor costo, riesgos ambientales y físicos en el personal que opera. La carencia de una mayor reincorporación de crudo ante una depletación acelerada de los campos actuales, y la intención de tener una mayor producción, no superior a dos millones de barriles diarios, ha dado lugar a reducir el presupuesto en la parte de exploración y producción.
El concepto actual: México no requiere vender crudo en el mercado internacional, y, por consiguiente, a las reservas actuales actualizadas, es suficiente para mantener la materia prima para las refinerías que tiene PEMEX. ¿Cuánto tiempo tiene?
Esto indica que el modelo de negocio cambia, y ahora estará enfocado en las ventas internas, que se centrarán principalmente en la comercialización de combustibles como la gasolina, diésel, turbosina, combustóleo, gas licuado de petróleo y algunos petrolíferos, siendo estos una mezcla entre lo producido e importado, lo que requerirá el mercado interno mexicano. Hoy en día representan el 75 % de los ingresos totales de la empresa, y las exportaciones de crudo equivalen al 20 a un 24 %.
La Secretaría de Energía ha informado que PEMEX, de acuerdo con sus proyecciones en el sector de petrolíferos del año 2025 a 2037, importará entre el 10 y el 15 % de la gasolina del total de la demanda. Se dejará de importar 2025 en Diesel, siempre y cuando todas las refinerías del sistema nacional de refinación produzcan Diesel de bajo azufre (hoy día solo producen el 33 % del total de la demanda).
La refinería Olmeca, en la actualidad, solo está llevando a cabo pruebas, y entre ellas el uso de un diésel con alto contenido de azufre, para evaluar el rendimiento de las plantas que eliminan este, y puedan cumplir con las normas ambientales y de calidad de los combustibles. Confirmando que no está refinando crudo. En 2027, se espera que opere con la máxima carga de entrada de crudo del tipo Maya, y solo cubriría el 20 % de la demanda de gasolina y el 30 % del diésel.
En el presente de México, existen buenas intenciones del cómo debe ser un país en el corto plazo, y la realidad que las generaciones que nacieron entre el 2010 a 2020, tendrán problemas económicos, y sobre todo el tener un país que será de alta migración de personas de otros países.
México debe tomar una decisión sobre el futuro en el presente, ya que tendrá un mayor gasto a partir del 2050 en el desarrollo social, en los rubros de salud y pensiones. Los cuales aumentarán el gasto a partir del 2030 debido a que el país carece de una certeza económica real.
Hoy México, del total del gasto programada, el 69 % está destinado al desarrollo social, y solo el 24 % al económico, y una deuda pública que, en 2025, podría llegar a representar el 50 % del PIB.
En el mundo se encuentran actualmente más de 8,000 millones de personas, y la tendencia debiera indicar un incremento de acuerdo con lo experimentado en las últimas décadas, pero esto no ocurrirá. En estudios realizados por el club de Roma, la universidad de Washington, entre otros, indican que la población podría llegar al cenit de población en el 2050 a 2060 de alrededor de 9,400 a 9,700 millones de ser humanos, y a partir de esta fecha habría una contracción de la población mundial de entre 6,500 a 7,500 millones.
Esto se debe principalmente a que, en el número de nacimientos en comparación con el fallecimiento, estará cerrando la brecha entre estos parámetros. Espera que entre el 2070 a 2080, puede haber una relación de 1:1; por cada bebe nacido, una persona fallecerá.
La relación anterior conducirá a que la población en edad de laborar disminuya y, de esta forma, tener una población en promedio de edad mayor a la observada en las últimas décadas. Derivado de esto, algunos países han aumentado la edad de jubilación ante la disminución de la población en edad laborar.
En 2024, la India superará a China en el número de población, y se prevé que este último, en el 2100, la población disminuya un 50 % en comparación con el número actual. Este cambio surge fundamentalmente debido a que la tasa Total de Fertilidad (TFR) ha disminuido en algunos países. La cual se refiere al número total de hijos por mujer necesario para que cada generación se reemplace de manera exacta sin necesidad de migración internacional. Un valor inferior a 2.1 provocará que la población nativa disminuya. El promedio global actualmente es de 2.3, siendo que en 1950 era de 5.0. Hoy en día, la mujer tiene la decisión de tener un número de hijos y poder ser parte de la sociedad, y que anteriormente era discriminada y solo relegada a la fertilidad. En la actualidad, la generación de los años 1990 y 2000 no está comprometida con la creación de un hogar con hijos, ya que existen otros aspectos distintos de vida, en comparación con las generaciones de 1950 y 1970.
En México, este fenómeno también tendrá lugar, y de esta forma podría haber un colapso económico y de la sociedad ante la falta de mano de obra. Podría haber menos personas, pero las cosas continuarán aumentando de valor, y requerirá más dinero público para poder satisfacer el todo, y la gente debería percibir una mayor retribución por su trabajo.
El análisis para México:
México tiene una población de aproximadamente 129 millones de personas, y ocupa el décimo lugar a nivel mundial en cuanto a población. Podría alcanzar un máximo de 143 millones de personas en 2050, y reducir a 115 millones de personas en el 2100.
Hoy en día, la densidad de personas por kilómetro cuadrado, en comparación con el total del área que representa en el territorio México, es de 66 personas por kilómetro cuadrado, y para el 2050 espera llegar a 74, y en 2100 a 100. Dado que en México, el 89 % de la población se encuentra en áreas urbanas, y para el año 2050 se prevé que llegue a estar entre el 98 a un 99 %. México será una sociedad sin una población rural.
Actualmente, existe la relación que indica: Por cada dos recién nacidos, hay un fallecido (2:1). En el 2054 habrá una relación 1:1, y en 2100 revertirá la tendencia de 1:2.
En 1950, la tasa de fertilidad era del 7.0 nacidos por mujer, y en la actualidad es del 1.77. Espera para el 2100 legua a 1.00
En la actualidad, se encuentran 88 millones de individuos en edad de trabajo, desde 15 hasta 65 años, y 12 millones con una edad superior a 65 años. En el año 2050, habrá 93 millones de personas en edad de laborar, y 25 millones de personas de edad superior a los 65. En el año 2100, se encontrarán 61 millones de individuos en edad de labor y 41 millones de individuos mayores de 65 años. El número de personas que pueden trabajar será reducido cada día en México.
En 2024, el promedio de edad de las personas alcanzaría los 30 años en 2024, y para 2050, aumentaría a 40 años, y con la tendencia observada podría llegar a 60 años en 2080. Esto tendrá consecuencias económicas en función de la productividad y un incremento en el gasto en la salud. En caso de que se confirme esta tendencia, México debería convertirse en un país de inmigrantes, con el propósito de mantener la economía del país (a los Estados Unidos migran en promedio entre novecientos mil y a un millón de personas en forma anual).
México exporta al mundo entre cuarenta y cincuenta mil personas, y que tienen que migrar fuera de México en promedio los últimos seis años. Este número de personas representa el 5 % de recién nacidos en promedio anual, y serán el futuro que migrará.
En los últimos cuatro años, hemos observado cambios geopolíticos a nivel energético, y económicos en el mundo. Los cuales están influyendo principalmente en el costo del dinero para el poder refinanciar las deudas públicas de gobiernos, y proyectos en el mundo. Afectando principalmente a las energías renovables para generar electricidad con cero emisiones de contaminantes.
Un estudio realizado por Wood Mackenzie, sobre el costo del dinero, ha dado lugar a que la transición energética respecto a la producción de la electricidad con energías renovables e cero emisiones este en pausa. Debido a las tasas de interés elevadas, establecidas por los bancos centrales de los países después del año 2020, cuyo propósito ha sido el control de la inflación y su impacto en la economía global.
No se ha tenido en cuenta esto por ninguna de las precandidaturas para el próximo período de la administración de la nación en México. Cada una de ellas, y él, están considerando con buenos deseos en el papel, al cómo dejar de utilizar a los combustibles fósiles para generar electricidad, y como utilizar en mayor proporción a las energías renovables con cero contaminantes. El papel puede aguantar todo, y la realidad sin dinero, no.
México no puede, implementar o ejercer un presupuesto para construir una obra como fue, y sigue siendo la asignación de recursos de la nación para construir la refinaría Olmeca. Además de los 80 a 90 mil millones de pesos que la secretaria de hacienda transfiera a la comisión federal de electricidad en forma de subsidio, para compensar la ineficiencia de generación de la electricidad con base la utilización de su capacidad instalada. Todo esto, al fin y acabo, resume a tener dinero, y el cual tiene un costo, no tenerlo. La nación tiene que asumir, y la consecuencia, la afectación a las finanzas públicas del país, y al tener una mayor deuda pública, y la cual puede representar, posiblemente entre 2030 a 2035, entre el 60 a 70% del total del PIB anual del país.
El dinero, utilizado para financiar una obra en energía, déficit presupuestal, deuda pública o préstamos de una empresa, tiene un costo financiero, y el cual tiene que ser pagado.
El estudio presentado, y que puede ser utilizado por Mexico, como un punto de inflexión hacia el futuro. Podrían ser considerados por las propuestas que hoy día hay sobre la mesa en las campañas. Hoy hay que unificar conceptos energéticos, y no seguir con la costumbre de que cada persona que llega a administrar al país y solo concentra del como cree en su período finito en el tiempo, el cómo debería ser la política pública energética-económica-financiera en el país.
Estas son algunos hayas e observaciones que en México deben ser asumidas e consideradas para la transición energética para generar electricidad con energías renovables:
A) La transición energética, hacia el concepto de cero emisiones, podría requerir una inversión de 75 billones de dólares para 2050.
B) La industria del petróleo y gas tiene menos exposición al costo de la deuda, y esto indica que tiene menos afectación, al tener una rápida recuperación del financiamiento en un menor tiempo.
C) El apalancamiento (dinero inicial) es mayor, para las empresas de energías renovables. El cual puede fluctuar entre un 50 a 55% del total de la vida de un proyecto. Esto expone a tener una tasa de interés mayor, debido al tiempo de recuperación, y la forma contractual de recuperación del dinero utilizado para la construcción y puesta en operación.
D) El costo promedio ponderado de la deuda de energías renovables fluctuaba entre los 1 a 2% antes del 2021, y hoy día se ha observado un rango de 4 a 5%. Pudiendo llegar a los niveles de sectores como el de hidrocarburos que están entre 7 a 10%.
E) El incremento del costo del dinero a los proyectos renovable, y su alta intensidad de apalancamiento, ha originado el tener bajos rendimientos para tener flujo de efectivo para poder pagar lo antes posible la deuda o mejorar la operación. Los proyectos futuros de cero emisiones estarán en riesgo.
F) Cualquier proyecto de energía renovable con inversión pública o privada, deberá considerar el determinar el porcentaje del CAPEX, respecto del total entre este y el OPEX. Cuyo objetivo es el determinar la rentabilidad de un proyecto. Ejemplo de esto, podemos tomar el mercado de nuestro vecino comercial, los Estados Unidos, a donde una planta de ciclo combinado con gas natural, el CAPEX representa solo el 10% del total del proyecto. Pero una planta de paneles solares, este alrededor del 65% y una eólica en tierra del 68%.
G) Al tener una mayor cantidad de dinero a solicitar para un proyecto, el riesgo de recuperación puede ser alto. El cual puede disminuir: Si hay un contrato de largo plazo para la compra de la energía producida, además de estar dentro de un programa de subsidio o incentivos fiscales por parte del gobierno del país, y además que exista una certidumbre, sobre el precio en el mercado, al no haber cambios regulatorios constantes.
H) La combinación del porcentaje del CAPEX requerido, la certidumbre en el mercado, y el tiempo de pagar lo prestado, indica que tasa de interés será prestado el dinero para el proyecto. Tomando ejemplo, al mercado de EUA, indica que Un aumento de dos puntos porcentuales en la tasa de interés libre de riesgo, eleva el costo nivelado de la electricidad (LCOE), hasta en un 20% para la inversión de la generación de electricidad con energías renovables, y un 11% a las que usan la tecnología de ciclo combinado con gas natural (combustible fósil requerido para la transición energética). La energía eólica terrestre puede generar electricidad a un LCOE de 40 dólares /MWh, paneles solares 65 y una de ciclo combinado con gas natural de 80 dólares. Pero estas diferencias podrías reducir, ante la necesidad de tener un alto CAPEX, expuesto a tasas de interés altas.
I) El alto costo del dinero podría restringir los esfuerzos de transición, al reducir los subsidios, incentivos fiscales o recortar la inversión pública para una economía baja en carbono. Esto podemos verlo en las dos economías mundiales más grandes, la de EUA, la cual hoy día, de cada 7 dólares gastados, un dólar se destina a intereses de la deuda pública, y esto reduciendo los apoyos a la transición. China ha dejado de subsidiar a la nueva capacidad de energía renovable a partir del 2022, y esto debido a que tiene un acumulado de 55 mil millones de atrasos en pagos a subsidios. Hoy los gobierno, están más interesados en pagar el costo financiero de la deuda pública, al aumentar está en un mayor porcentaje del producto interno bruto. China en el 2005 la deuda representaba no más del 25 % del PIB, y ahora está por llegar casi al 80%.
Recomendaciones para México:
Mejorar los tiempos de las resoluciones a los permisos técnicos, y económicos. Apegado a la normatividad y leyes aplicadas vigentes. Implementando o mejorando las actuales, pero con un sentido de crecimiento, y no de control.
La aprobación y el ofrecimiento de incentivos claros, coherentes y sostenidos apoyarán las tecnologías incipientes con bajas emisiones de carbono. Mayor apoyo en el presupuesto al desarrollo económico.
Maximizar la eficiencia de los subsidios. Aplicar siempre y cuando aporten mejora en la confiabilidad, y costos al mercado. No usar, como herramienta política.
Al final de las cuentas, el que paga el costo de la electricidad, es el consumidor final, y el cual tiene que absorber todos los costos que integran al precio final.
Autor: Ramses Pech – Grupo Caraiva – Grupo Pech Arquitectos
Las personas para poder tener una vida, tiene que laborar en algo, y son pagadas con base a su conocimiento, experiencia, y tiempo que laboren para realizar dicha actividad que fueron contratados.
¿Cuánto debería ganar una persona para poder ser feliz?, y con ello el poder tener una vida digna.
En México en el 2024, ha tenido un incremento al concepto del cuánto es remunerado su trabajo, y es el llamado salario mínimo que puede preservar una persona. El cual identifica a las personas dentro de la población económicamente activa ocupada, al rango salarial a que están sometidos, ya sea que estén asalariados, o simplemente tengan esa entrada por un acuerdo mutuo con quien los ocupo. Pero algunos de la PEA, tienen la digna suerte de poder ser contratados bajo la inscripción, a lo llamado seguro social, y esto ayuda a identificar, cuantos pueden tener un poco de mayores beneficios en la sociedad laboral. Algunos datos que considerar:
Actualmente existen alrededor de 59.40 millones de personas en la PEA ocupada, y de los cuales, el 40 % de las personas perciben hasta un salario mínimo por día (23.79 millones).
El total de la PEA ocupada, 22.3 millones de personas están inscritos al seguro social, y esto representa un 38 % que tiene un poco mayor de beneficios. Pero de este número de gente inscrita al instituto, gana el 64.63 % hasta dos salarios mínimos (14.23 millones).
El salario en México está concentrado entre uno a dos salarios mínimos, y es aquí a donde debemos dejar en claro, el aumento este, hoy día, no ayuda a tener o alcanzar el cómo cubrir a los costos de una vida digna. El aumento debería ser en función del número de veces de salarios que percibes por día. Así sí.
Para ser feliz en la sociedad, debes cubrir el costo de vida, y el cual con información de la página en internet de Numbeo, y en la cual incluye: Alimentos, Servicios, Renta, Comer en la calle, Transporte, Ropa-Calzado, Entretenimiento. En México, el costo de vida para ser feliz por mes tiene un monto en pesos de:
14,902 para una persona
53,291 familia de 4 miembros.
En México de acuerdo con los datos del costo de vida, el 33 % del dinero de una persona o los hogares, está destinado para la compra de alimentos, el 27 % en la renta o pago de una vivienda, un 14 % utiliza para comer en la calle, 12 % transporte, un 6 % en servicios para el hogar, 5 % entretenimiento, y 3 % ropa y calzado.
Cabe mencionar que no está incluido el costo de la educación, salud o ahorro, simplemente es para el poder vivir, y ser feliz.
Ante esta aseveración de los datos, podemos indicar que:
Una persona ganando un salario mínimo, faltarían aproximadamente 7,932 pesos para ser feliz al mes, y al día 240 pesos. LLEGARÍA A LA FELICIDAD, SI GANARA DOS SALARIOS MÍNIMOS.
Una familia, trabajando dos de los miembros, y ganando cada uno un salario mínimo, requieren ingresos adicionales por alrededor de 39,951 pesos, y al día 1,290. LLEGARÍAN A LA FELICIDAD, SI TODOS TRABAJARAN. GANANDO cada uno de la siguiente forma: 3, 2, 1.5 Y 1 salarios mínimos.
Significa que las familias en México, para ser felices: “Todos deben trabajar”, y al menos uno o dos miembros, ya no puedan estudiar o alguna tenga que emigrar a otro país. Actualmente, ya está sucediendo en algunas regiones del país, presentan una mayor salida en los últimos 4 años.
Para que México pueda ser feliz, debería hoy día no existir el pago de un salario mínimo en la población económicamente activa ocupada. Pasar de los 22.3 millones inscritos al seguro social, a cuando menos el tener a 40 millones de personas inscritas ganando dos salarios mínimos, debido a que estas representan al total dentro de la PEA que están asalariadas por un patrón.
Ante los datos podemos decir: Que gran parte de la población que tiene una remuneración, presenta una infelicidad, al no poder cubrir el costo de vida. Esto está confirmado con el indicador del caldo de pollo, y al cual, dentro de la PEA ocupada, hoy día 23.7 millones de personas, no pueden preparar un caldo de pollo, y para poder hacerlo tiene que estar inscrito al seguro social.
El costo de un caldo de pollo para cuatro personas está alrededor de 370.64 pesos en 2024. Hay un incremento del 2022 a 2024 del costo del caldo en 41 pesos, y el salario mínimo en 76 pesos; solo sobran del aumento de este 34.82 pesos, y podría ser usado para el transporte para el trabajo.
Una persona que gana un salario mínimo, y es el sostén de un hogar, no podría tomar un día de su salario para poder dar a su familia, ese gusto. Ante esto, cuando menos dos personas deberían laborar, y poder tomar un día de sus salarios al mes, y poder comer el rico caldo de pollo.
Una familia, hoy día, y con base a los datos de costo de vida, salarios percibidos en la PEA ocupada, y los inscritos en el seguro social, no hay una felicidad en el mediano a largo plazo para las personas en México. Muchos de los padres, y algunos jóvenes, están cuestionando, si en realidad es una buena inversión, la educación para obtener una carrera universitaria o técnica, para el poder tener un mejor salario; debido a que en la realidad los estudiantes, no son remunerados en una buena forma.
Una analogía que podíamos percibir respecto a lo anterior, un joven en los Estados Unidos, trabajando en una cadena de comida rápida laborando 30 horas, ganan alrededor de 20 a 21 mil pesos en promedio en forma mensual, sin tener una carrera terminada. En México, uno titulado durante el cuarto trimestre de 2023, el salario promedió fluctuó entre los 7 a 9 mil pesos, trabajando alrededor de 37.9 horas a la semana.
Ante esta situación, algunos jóvenes, tiene que llevar a cabo cambios sobre su futuro para el poder alcanzar la felicidad, debido a que tienen el dilema: Ayudar a su casa económicamente, y poder estudiar al mismo tiempo. Otros tienen la oportunidad de terminar una carrera, y deciden no formar un hogar, hasta no tener algo seguro, y otros migran fuera de México para el poder asegurar su futuro, y estos últimos ya no regresan. Una beca al primer empleo es pasajera, y no es para toda la vida.
Conclusión:
Hoy más 23 millones de personas no pueden comer un rico caldo de pollo, y está en aumento. Hay más empleos, pero percibiendo una menor cantidad de veces de salario mínimo. Las personas e familias, no pueden cubrir el costo de vida ideal para ser feliz, y esto ha ocasionado que muchas familias, ahora tengan que trabajar todos los miembros, y alguno de ellos puede el terminar una carrera técnica o universitaria. Pero los que tienen la oportunidad de realizarlo, no quieren crear hogares ante un salario, bajo promedio al concluir sus estudios, y ante esto muchos están buscando migrar a otros países para el poder tener mejores oportunidades.
En México, ocasionará lo anterior en el corto plazo e mediano, un problema social, estructural en los hogares, ante la falta del dinero, y tiempo para una familia para poder ser feliz, por la necesidad de poder el tener el peculio necesario, ante el incremento del costo de vida.
Mucho empleo, sin calidad de vida en el futuro, y sin una felicidad real.
Existen metas específicas a cumplir para llegar al objetivo global de cero emisiones contaminantes a 2050; estamos viviendo lo que llamamos ‘los años de la transición energética’.
Países miembros de la Unión Europea han declarado que en 2035 sólo se podrán vender vehículos nuevos de cero emisiones. Esta es una declaración mortal para el diésel y la gasolina como combustibles. Sin embargo, esto no significa que los motores de combustión dejen de existir. Países fabricantes de vehículos, como Alemania, Italia y Francia, han declarado que los motores de combustión podrían seguir existiendo mientras sean impulsados por combustibles neutros.
Hace aproximadamente cinco años se puso de moda el hidrógeno como el más viable combustible de transición de forma que surgiera el término: ‘transitando hacia la economía del hidrógeno’. Los científicos tuvieron que evaluar cómo generar las cantidades de hidrógeno requeridas, que nunca se habían producido antes y transportarlas en forma segura por el mundo, además de considerar que esta generación de hidrógeno debería hacerse con energías renovables. Lo anterior hizo surgir dudas sobre la viabilidad del hidrógeno y aparecieron razones por las cuales se desalentó su uso.
Estas razones fueron, entre otras, dificultades en el uso de buques cargueros y tuberías para transportar hidrógeno, así como aspectos de seguridad para almacenar grandes cantidades de hidrógeno en los centros de transporte. Se buscaron alternativas como otros compuestos que podrían transportar el hidrógeno en forma más segura en grandes cantidades y a grandes distancias. Surgió el amoníaco como el candidato ideal.
Amoníaco El amoníaco (NH3) es un compuesto de un átomo de nitrógeno y tres átomos de hidrógeno. Surge como un candidato óptimo para transportar el hidrógeno. Esto es posible mediante el uso de tecnologías para dividir las moléculas del amoníaco en sus elementos básicos en el punto final de uso: una de nitrógeno y tres de hidrógeno….
Economista por la UNAM y Maestría en Educación por la Universidad Maya, tiene una amplia trayectoria en el Gobierno Federal en múltiples dependencias, así como en el gobierno de la Ciudad de México y en la administración de su estado natal, Tabasco.
En octubre de 2022 le fue asignada la Presidencia en la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y se dedicó a estudiar, entender y mejorar en lo posible el fino trabajo de la Comisión; durante poco más de un año no dio entrevistas, en su visión, no tenía mucho trabajo para reportar a los pocos meses de haber tomado el puesto. Ahora, con más de un año en el mismo aceptó reunirse con nosotros para charlar sobre el trabajo de la CNH y su visión a futuro de la misma.
“Siempre he estado vinculado, al menos intelectualmente, al sector”, comenta Díaz Lastra sobre su sentir en octubre de 2022 cuando asumió el cargo tras la renuncia del anterior Comisionado Presidente, era entonces Prosecretario en el Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos, “que absorbe y absorbe mucho”.
“A mí me interesa fundamentalmente cuando me toca hacer cabeza en alguna oficina o en algún grupo de trabajo, es que quienes trabajemos, trabajemos con cordialidad, que nos llevemos bien, que colaboremos bien y que estemos en un clima relajado, propicio para el trabajo y los resultados. Tenemos que ser exigentes con nosotros mismos en torno a los resultados. Entonces, desde que llegué, una de las primeras decisiones fue reunir a todo el personal en la planta baja, dirigirme a ellos, presentarme y decirles, ‘quiero que todo mundo se sienta de gusto de venir a trabajar aquí y quiero que me ayuden a que todos nos sintamos muy orgullosos de trabajar en la Comisión’”.
Encontró en la CNH “algo novedoso y muy interesante. Yo conocía de antemano las funciones generales de la Comisión; estuve muy pendiente en su momento de las rondas, pero no tenía el conocimiento del interior de la CNH”.
Como ha sucedido a lo largo de su vida profesional, dedicada a la administración pública este nuevo puesto trataba al inicio de “adaptarse a algo que no es mi especialidad. Yo estudié Economía y muy pocas veces he trabajado estrictamente en Economía, he trabajado mucho en administración pública y he trabajado en Economía cuando he trabajado por mi cuenta en consultoría (…) esto era iniciar de nuevo, empaparse, introducirse en un área específica desde ese punto de vista novedoso para entender lo que se hace y después buscar qué se debe hacer para mejorar”.
Durante toda la plática, Díaz Lastra habló de los especialistas de la CNH como el verdadero corazón de la Comisión, los profesionales que hacen el trabajo técnico, incluso en campo, “ellos son los que elaboran los planes de desarrollo, de exploración, los programas de inversión de cada año, los proyectos para perforar, etc. Se analiza lo que se está planteando el equipo técnico de cada empresa y ver que tenga congruencia, que sea correcto, que esté técnicamente soportado de una manera suficiente. Cuando le toca a uno ser cabeza de instituciones de este calibre, no puede uno estarse metiendo en los detalles. En primer lugar, porque materialmente no alcanza el tiempo, en segundo lugar, porque meterse en la profesión de alguien que está dedicado a eso, pues es ir a echarle a perder su trabajo”.
Sobre su posición al frente de este equipo especializado, opina que “lo que hace uno es apoyar el trabajo de ellos y a la vez -en el caso de ser comisionado- se apoya uno en el trabajo de ellos pues porque finalmente la decisión la tiene el órgano de cada uno de los comisionados tiene que emitir un voto a favor o en contra de cada dictamen y uno trabaja con diferentes dictámenes, según el caso, en las diferentes áreas de la comisión”.
El sector
Agustín Díaz Lastra buscar ser muy claro en sus definiciones, “para mí el sector es la energía y los hidrocarburos es una industria, yo le llamo ‘industria de los hidrocarburos’ porque es como una rama de industrias, vamos a decir, que confluyen en una actividad fundamental.”
Un aspecto que destaca el Comisionado Presidente de la CNH en los hidrocarburos es la cooperación. “Aquí en México, por ejemplo, se ve a cada rato empresas trabajando con Petróleos Mexicanos, empresas trabajando entre ellas. No me he puesto a sacar cuentas, pero quizá la mitad de los casos, de los contratos, las empresas no van solas, sino que se asocian entre dos y tres; Una tiene una cosa, otra tiene otra cosa y colaboran y cooperan”.
Entre los grandes proyectos de extracción que hoy ocupan a la CNH y a gran parte de la industria son los campos de Ixachi y Trion, que por su tamaño son los que más llaman la atención, pero hay más de ellos. Cuestionamos a Díaz Lastra sobre su visión del personal técnico y la posible falta de profesionales a futuro, “ellos siempre hacen falta en todas las ramas y por supuesto en este, y máxime que es muy amplio. Uno piensa en general en la Ingeniería Petrolera, necesitamos personal que sepa de mecatrónica, electromagnética y procesamientos. Personal que está saliendo de las universidades hay en todo el país, allí lo que es interesante es que haya un nivel muy bueno de los egresados.
Para el Comisionado Presidente, el referente en cuestión a profesionales en este ramo es la Universidad Nacional Autónoma de México, “de la UNAM han salido los grandes Ingenieros de Petróleos Mexicanos del siglo pasado y actualmente también. Necesitamos que haya un intenso intercambio con el exterior, no se trata de quién nos alcanza y entonces que vengan sino al revés, necesitamos que nuestros jóvenes egresados salgan a especializarse, que conozcan otras partes donde se opera en aguas profundas, en aguas someras, en tierra, a diferentes temperaturas, latitudes, con personal egresado de otras universidades de Europa, de Rusia, porque el intercambio es sumamente valioso”.
Las innovaciones y nuevas tecnologías que se apliquen en el futuro cercano van a marcar la pauta y esa es, en parte, la que tendrán que seguir las universidades para que sus egresados no solo mantengan su empleabilidad sino que sean los que lideren los cambios en el futuro.
“La tecnología que se vaya a requerir para los desarrollos futuros es donde se rige la oferta y la demanda, se puede comercializar si uno la tiene desarrollada. Generalmente la empresa petrolera -casi cualquiera en el mundo- es un encadenamiento de empresas que trabajan y confluyen para un fin determinado, es más importante la cooperación, la colaboración, el intercambio para ello, tenemos en México egresados con mucha experiencia en varios temas y pueden apoyar en otras latitudes y por el otro lado si hay otras vocaciones en otros países pues apoyarnos en ellos también para hacerlo. Insisto que la industria de los hidrocarburos tiene un ambiente de mucho intercambio”.
En entrevista con Jacobo Bautista, Director Editorial de P&E
La figura de comisionado
Este año la Comisión Nacional de Hidrocarburos estrenó tres comisionados, cuya función final es votar los acuerdos, los dictámenes que propone en personal profesional, “aquí lo que hacemos es que tenemos unas pláticas donde luego de unas presentaciones donde particularizamos cómo opera cada una de las áreas internamente -para que tengan una familiarización, por más que se pueda conocer términos generales desde fuera, no es lo mismo que un titular de una unidad que lleva años a cargo de esa unidad le explique, con los directores generales, de manera exhaustiva, cómo opera, cuáles son las direcciones, los currículos que presenten, eso es una parte fundamental para que ellos sepan quiénes están trabajando en exploración, análisis económico, las diferentes ramas que se tienen que atender aquí”.
El desarrollo de su integración a la Comisión, relata Agustín Díaz, depende de cada comisionado y cómo se va desarrollando cada uno de los casos sin olvidar que el trabajo nunca se detiene y que se tienen que integrar a los procesos de la CNH. “Pero salvo en el caso de personas como el doctor Néstor Martínez, él tenía toda la experiencia como para poder dirigir a los equipos profesionales. Cuando a mí me corresponde trabajar en un dictamen, yo lo que pido es que me expongan cómo van llevando las cosas y si a mi juicio veo que lleva el rigor necesario, no improviso de geólogo ni de geofísico, entonces no cambiamos eso, lo que hicimos -en mi caso- fue trabajar en planeación, organización, entonces hemos estado mejorando esa parte para que en todo el año pasado para funcionar mejor y que las cosas funcionen”.
Y agrega sobre su experiencia personal: “cuando llega uno de comisionado, uno se suma. En mi caso me correspondió como Comisionado Presidente, a recibir lo que la gente aquí interiormente nos dice, esto podemos mejorarlo y por el otro lado recibe uno lo que le dicen por ejemplo o directamente las empresas o las asociaciones de empresas y también los otros órganos de gobierno con los que interactuamos, entonces ellos les van dando una opinión de cómo está funcionando y cómo podemos colaborar mejor y en mi caso eso fue lo que a lo que me dediqué el año pasado y sigo en ello, pero ya lo fuerte ya se hizo”
La transición
Los trabajos del Órgano de Gobierno de la CNH no se detienen y aunque hay un componente político en ello, las decisiones son técnicas, lo mismo para un programa de transición en el Campo Paso de Oro en la cuenca de Tampico, que para modificar planes de desarrollo en la perforación de un pozo exploratorio en Poza Rica, pero pensando en la estrategia, en lo que ya se ve en el horizonte, Díaz Lastra es claro al decir que “la prioridad es preparar por si el equipo de transición quisiera acercarse a la Comisión”.
Siendo la política energética una de las más importantes para la economía del país y los hidrocarburos juegan un papel fundamental en la misma, en la CNH deben “estar preparados para explicarle (al equipo de quien gane las elecciones) cómo vemos nosotros las cosas, y dar la mayor cantidad de información posible, dado que tenemos tantos datos aquí que son muy útiles para que quienes vayan a hacerse cargo, pues serán las autoridades que van a tomar decisiones, sobre todo a partir del inicio de la nueva administración. Nuestro objetivo es darles la mayor cantidad de elementos para tomar sus decisiones de política sectorial, ahí sí sectorial, la ley dice que el Poder Ejecutivo es quien dicta las políticas sectoriales y de ahí en fuera los demás trabajamos con esas políticas, las políticas que se decidan en el poder ejecutivo y de acuerdo con el marco legal nosotros trabajamos”.
De aquí a la transición, el equipo de la CNH se apresta a tener lista toda la información, “para lo que quieran saber y lo que quieran decidir”.
Antes de la transición, sin embargo, hay un tema que ha sonado en el sector como parte de una gran discusión, que son las iniciativas de reformas que ha enviado el Poder Ejecutivo al Legislativo que incluye la desaparición de varios órganos de gobierno, entre ellos la Comisión Reguladora de Energía y la Comisión Nacional de Hidrocarburos.
¿Les ocupa, les preocupa? Le cuestionamos a Agustín Díaz Lastra, quien es muy claro al responde que no se han ocupado del tema “porque estamos dedicados al trabajo que tenemos que sacar por ley. En este momento tenemos un marco legal que nos dice exactamente que es lo que tenemos que hacer y eso nos ocupa. No nos preocupa porque no es una decisión propia, es decisión del Poder Ejecutivo y del Legislativo. Lo que deben hacer siempre es respetar cada quien su ámbito de competencia, esas son decisiones que no nos corresponde a nosotros y cuando los decidan quienes tienen esas facultades, ya nos comunicarán y nos adaptaremos a las leyes que sean, ya sea que los cambios que haya lugar -no particularizo ninguna- sino cualquier cambio que venga de la ley, nosotros nos adaptamos a ella”.
El equipo de profesionales
Durante toda la plática, Agustín Díaz Lastra se refirió al equipo de especialistas con los que cuenta la CNH, para finalizar nuestra charla quisimos que se extendiera en el tema del talento con el que cuenta la Comisión a su cargo.
“Buena parte del personal que colabora en la Comisión Nacional de Hidrocarburos proviene justamente de la industria de los hidrocarburos, es decir Petróleos Mexicanos, porque antes Pemex era directamente la encargada de la exploración, extracción, comercialización e industrialización de los hidrocarburos; sin embargo alrededor de Pemex había muchas empresas de servicios, empresas muy grandes internacionales, mexicanas, muchas de ellas. Buena parte de quienes estuvieron aquí, quienes han estado tanto como Comisionados y personal profesional calificados tienen experiencia práctica en la exploración y extracción de hidrocarburos, han estado en Petróleos Mexicanos, y han estado en la academia”.
Y sobre la academia se extiende porque “actualmente bastantes de nuestros compañeros dan clases en las principales universidades, en la UNAM” y con la máxima casa de estudios, subraya, tienen una excelente relación de cooperación, “de trabajo, de tal manera que eso permite una solidez en los trabajos que lleva a cabo el personal de la Comisión y por el otro lado estamos procurando estar enviando personal a las zonas de trabajo continuamente para que estén viendo cómo son las circunstancias en el trabajo real en las zonas petroleras que aquí nosotros dictaminamos, analizamos, evaluamos. Lo que se nos entregan son estudios, documentación, análisis, evaluaciones y eso es lo que se revisa, que todo tenga una coherencia, una congruencia que esté basado en datos científicos”.
La evolución
“Si podemos regular con menos elementos, pues es mejor, tanto para las empresas como para nosotros mismos. Estar revisando lo que ya no tiene caso revisar tantas veces. Pienso que ahí puede haber otro cambio significativo”, relata el Comisionado Presidente sobre la evolución que ha buscado en el ente regulador que preside.
En el sentido en cómo colaboran para que la industria tenga un impacto directo en el desarrollo nacional, menciona distintos convenios, lo mismo con Naciones Unidas que con instituciones educativas y con gobiernos estatales.
“Esa parte me parece que es importante, nos pusimos en contacto ya con los gobiernos locales para tener mayor presencia en los estados, nos interesan mucho las universidades regionales, los institutos, los politécnicos, los egresados y las pequeñas y medianas empresas de prestadores de servicios a la industria de hidrocarburos que puedan desarrollarse en las regiones donde está la exploración y la extracción de los hidrocarburos”.
Sobre los proyectos más grandes que se avizoran, Diaz Lastra es optimista porque si bien está Trion y el Campo Ixachi en Tierra Blanca, Veracruz, prefiere pensar en que tendremos casos de éxito que no vislumbramos en la actualidad, “las grandes empresas empiezan en un garage, empiezan en una cochera, y después son las más grandes del mundo. Entonces, para mí, todo es importante”.
La estrategia de sustentabilidad de las empresas ya no es un tema de moda, o un movimiento empresarial para seguir el paso de la competencia en los diferentes mercados. Se trata de un plan de transformación de los negocios, que se monetiza, genera ahorros importantes y contribuye a cuidar la salud del planeta.
Texto: Valeria Rivera, directora de Comunicación y Desarrollo de Negocios de Siemens México, Centroamérica y el Caribe
Una de las tendencias tecnológicas que genera un acelerado movimiento de las empresas hacia acciones concretas de sustentabilidad es la electromovilidad, misma que comienza a ser utilizada en toda la cadena de suministro, transportando personas, productos y servicios.
En México, una de las empresas panificadoras más importantes del país, ha sido pionera en la implementación de proyectos de movilidad eléctrica. Su camino en la descarbonización de sus operaciones de transporte se remonta a 1994, una época en donde no había incentivos para transitar hacia una flotilla de última milla eficiente y sostenible.
De acuerdo con directivos de la empresa, la compañía inició buscando una solución que no existía en ese entonces en el mercado: un vehículo eléctrico (VE) de reparto, que sirviera para distribuir los productos. Según diversos relatos, a un equipo de personas de la organización les surgió la idea de electrificar el transporte, esto, tomando como referencia los famosos ‘carritos de golf’. Al término de un año, lograron implementar esta tecnología en 25 vehículos, que comenzaron a hacer la distribución de productos en el centro de la Ciudad de México. El caso tuvo tanto éxito, que comenzó a replicarse en diversas entidades del país.
El siguiente paso se dio en 2004, cuando escalaron su estrategia para implementar vehículos eléctricos, más grandes. Diez años después, una empresa filial del grupo entró en la planificación para diseñar y crear un nuevo vehículo para la flotilla de distribución, naciendo así, la primera generación de VE fabricados por la corporación, con el diseño, trabajo e ingenio de colaboradores mexicanos.
La estrategia de movilidad sustentable que hoy lleva a cabo esta empresa mexicana a través del reemplazo de los vehículos de combustión al término de su vida útil representa un reto en la infraestructura de distribución y carga de energía. Y es aquí, donde Siemens colabora para optimizar su operación y gestión.
Contar con una flotilla con estas cualidades no solo trae beneficios económicos en el costo total de propiedad de las organizaciones, también refuerza la eficiencia operativa y la reputación de los negocios. Por ejemplo, con los cientos de vehículos electrificados que ha incorporado esta empresa de alimentos a su distribución, ha logrado evitar aproximadamente 6, 600 Tn de CO₂.
Los sectores que busquen transformar su movilidad hacia la electrificación deberán de hacerlo de manera estratégica. No se trata únicamente de administrar las unidades, también es importante hacer una recarga eficiente, maximizar la vida útil de las baterías y romper los paradigmas sobre su uso. Prueba de esto son todas las tecnologías que nos permiten implementar una producción de baterías de litio de manera sostenible, considerando su reutilización en soluciones de energía de paneles fotovoltaicos, entre otros.
En Siemens, sabemos que la electrificación del transporte jugará un rol decisivo en la lucha contra el cambio climático (el transporte ocupa 33% de la energía consumida en el mundo, mientras que es responsable de más de 25% de las emisiones globales de GEI[1]). Por ello, hemos decidido emprender la colaboración, mediante la firma de acuerdos que impulsen el transporte electrificado en el país. Así lo hemos hecho con actores tan importantes como VEMO y Kiin Energy, estando seguros de que robusteceremos la infraestructura de distribución y recarga eléctrica.
Hoy, el llamado es hacia los sectores industriales del país, para que trabajemos en ecosistemas, con la finalidad de cumplir los objetivos de sustentabilidad a través de estrategias de quíntuple hélice (industria, academia, gobierno, asociaciones y particulares).
Es momento de pasar de los ‘egosistemas’ a los ‘ecosistemas’. La colaboración será la única vía para hacer frente, de manera exitosa, a los problemas más complejos de la historia humana. Y que mejor ejemplo que el ‘pan electrificado’ que llega a miles de hogares en México y el mundo.
El Cambio Climático está sacando de sincronía las estaciones y lo notamos con las épocas de lluvia. Sí, puede acelerar el cambio de estaciones, de hecho, muchas plantas están floreciendo mucho antes de tiempo y en algunos lugares ya no cae suficiente nieve. Esa es una de las tantas implicaciones que trae este fenómeno y ahora el año 2024 inicia con un horizonte sombrío con relación a nuestro medio ambiente, la crisis climática sigue avanzando y una vez más vemos que como especie no hemos podido ni siquiera ponernos de acuerdo sobre la manera de asegurar un mejor futuro para todos.
Sube la temperatura Se estima que este mismo año, la temperatura promedio global sobrepase 1.5°C por encima de la temperatura de la era preindustrial. Aunque este aumento no será permanente por el momento, James Hansen (de los más destacados climatólogos a nivel mundial) estima que a finales de esta década sobrepasaremos esta marca de forma permanente, con una alta posibilidad de que superemos los 2.0° C en la década del 2030 (https://www.theguardian.com/environment/2024/jan/08/global-temperature-over-1-5-c-climate-change). Cada aumento en temperatura, por pequeño que sea, desencadena extremos climáticos con mayor intensidad, llámese sequía, inundaciones, incendios, períodos prolongados de temperaturas elevadas extremas, etcétera.
Sin acuerdos La COP 28, que culminó en diciembre de 2023, quedó sin un acuerdo que realmente reduzca las emisiones de gases de efecto invernadero, hace un llamado a reducir progresivamente el uso de combustibles fósiles, pero solo con relación a la generación de electricidad y en calentadores, no menciona las otras fuentes de CO2 en la industria, plásticos, agricultura, etc. Todo esto mientras países como Estados Unidos está extrayendo la mayor cantidad de petróleo en su historia (https://www.thecooldown.com/green-business/us-oil-production-explained/). Las economías en crecimiento de China e India continuarán alimentando la demanda de carbón incluso cuando establezcan ambiciosos objetivos de energía renovable, según los expertos. Mientras que China es el mayor consumidor de energía del mundo, India ocupa el tercer lugar a nivel mundial, y ambos países son los principales consumidores de carbón en su esfuerzo por impulsar el crecimiento económico.
Acelerado Las temperaturas globales han aumentado constantemente desde la década de 1970, hasta que se superó 1 grado de calentamiento global por primera vez en 2015, según los datos históricos de temperatura de Copernicus. Bastaron ocho años para saltar otro medio grado por encima de los niveles preindustriales, las estadísticas muestran que el cambio climático se está acelerando.
Mauricio Alcocer Ruthling es Profesor-Investigador y Responsable Técnico del Centro de Tecnología en Iluminación de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG). Es experto en temas de cambio climático y eficiencia energética. En su experiencia ha sido Director del Centro de Sustentabilidad y Energía Renovable de la UAG y Director de la Escuela de Biología. Fue Responsable Técnico del plan Estatal de Acción ante el Cambio Climático y Coordinador del Proyecto: Iniciativa de Ley Estatal ante el Cambio Climático.